lunes, 27 de febrero de 2012

Enseñanza de la lectura y la escritura en primero y segundo grados de Educación Primaria

El Programa de Español de 1993 daba libertad a los docentes para elegir cualquier método de enseñanza de la lectura y la escritura; en cambio, aunque el Programa de Español del 2000 no mencionaba nada al respecto, las modificaciones hechas a los libros de texto ofrecieron a los maestros una guía sobre la manera de enseñar a leer y a escribir.

Por su parte, los programas de español, publicados en 2009 y los ajustes para la articulación de la Educación Básica propuestos en 2011, reconocen de manera explícita los procesos por medio de los cuales los niños se apropian del lenguaje escrito (ver el apartado “Las etapas de desarrollo en la apropiación del Sistema de Escritura”) y plantean la necesidad de abandonar los métodos tradicionales de enseñanza de la lectura y la escritura.

La propuesta de los programas permite crear condiciones que favorezcan la adquisición del sistema de escritura por parte de los niños, de manera que en las situaciones didácticas propuestas, los alumnos pongan a prueba sus hipótesis sobre la escritura y avancen en sus propios descubrimientos acerca de lo que es el lenguaje escrito.

Se trata de permitirles y ayudarles a escribir de acuerdo con sus hipótesis y de ayudarlos, creando situaciones en las que se cuestionen sus ideas, para que las contrasten y puedan acercarse cada vez más al descubrimiento de las convencionalidades de la escritura.

De este modo, en primero y segundo grados también se establece como modalidad de trabajo los proyectos didácticos, en los cuales los alumnos se vean en la necesidad de elaborar productos del lenguaje que posean un propósito comunicativo y, por supuesto un propósito didáctico. El primero permitirá apropiarse de prácticas sociales del lenguaje y el segundo ayudará a descubrir las características y el funcionamiento del sistema de escritura.

Una diferencia muy importante entre los proyectos didácticos de primero y segundo grado y los de tercero de primaria a tercero de secundaria, es que en los primeros los alumnos leerán y escribirán con el apoyo del maestro (es decir, le dictarán lo que quieren expresar) y leerán a través de la voz del docente lo que necesiten o quieran saber acerca de un escrito.

El maestro fungirá como escribano y lector de los niños; y en esa función les irá mostrando lo que se hace al leer y al escribir, de manera que, conforme avance el tiempo los alumnos se vayan apropiando de estas formas hasta volverse independientes; es decir, lectores y escritores autónomos.

Este proceso de aprender a leer y a escribir leyendo y escribiendo (aunque no lo hagan de manera convencional) o de apropiarse de la lectura y la escritura viendo leer y escribir a otros, requiere mucho tiempo; y suele extenderse hasta el segundo grado, particularmente en aquellos contextos en los que los niños tienen poca experiencia extraescolar con situaciones de lectura y escritura; por lo que no es conveniente reprobar a los alumnos si no logran alfabetizarse completamente en primer grado.

Más adelante se da un ejemplo de la forma en que se pueden realizar las actividades de un proyecto para contribuir al aprendizaje de la lectura y la escritura.

Tomado de: Guía para el Maestro. Educación Básica. Primaria. Primer grado. 
Editado por la Secretaría de Educación Pública. México. 2011.
 Autores: Laura Lima Muñiz, María Luisa Díaz González, Celia Díaz Argüero y Enrique Lepe García.